Poesía internacional: Slavi Avik Harutyunyan ( Artsaj)

Traducción del armenio por Narine Ayvazyan

Slavi Avik Harutyunyan (Nagorno-Karabaj, 1965) Publicó durante los primeros 15 años en el periódico «Pioneer Kanch». De 1983 a 1985 sirvió en el ejército soviético en Siberia. En 1988 se graduó en la Facultad de Filología de la Universidad Estatal de Stepanakert. En el cuarto año de graduación fue admitido en la Unión de Escritores de la URSS (actualmente miembro de la Unión de Escritores de Armenia).

En 1997 se graduó en la Facultad de Dramaturgia Cinematográfica del Instituto Estatal de Cinematografía del Estado de Moscú, y en 2000 terminó su doctorado en la Universidad Estatal de Cultura y Arte de Moscú. Sus poemas han sido traducidos al ruso, inglés, español, alemán, francés, italiano. Las presentaciones de sus libros tuvieron lugar en muchas ciudades europeas, En particular en Madrid, Barcelona y Valencia. Sus libros «El cielo y la tierra» (en armenio), «Telegramas tardíos» (en español), «El cielo sin pájaros» (en español, inglés, francés), «L’uccello Solitario» (en italiano), «Las fronteras semióticas del arte» (en ruso, armenio), «Dias de paz-Խաղաղ օրեր» ( en español, armenio)

***

Día
es un día
murmurando a sí mismo
(solo el olor de la cocina
despertándose con empujones
de vecinos-familiares)

la tía Genya
que se preparaba
para las fiestas de noviembre
delante del espejo
estricta como el caudillo
alisa las arrugas de su mandíbula
murmurando
uno dos
uno dos
postura firme

el tío mayor
sobre la silla
en los cajones del armario
busca la bandeja roja de su Patria
que con la tía
habían escondido
tras las últimas fiestas

el olor de galletas gata
preparada por mi madre
llena mi habitación

los vecinos-familiares
que han llegado
a desearme buen viaje
en la cocina están disfrutando
de la galleta gata
y tomando una infusión

más tarde los hombres
me darán consejos inteligentes
recordando sus aventuras
de la mili
las mujeres susurraran
moviendo las cabezas
ay ay ay
al parecer esa resultó
ser un sinvergüenza
ha dejado sus estudios
y va a hacer la mili
(seguro que es por aquella chica)

sé que mi padre
en ese momento
prepara calladita mi maleta

mi abuela bajará a la bodega
meterá el algodón en la mantequilla
y la encenderá
como una vela
(ella lo llama lámpara)

el tío menor
en una bici
irá tras el camión
y como habíamos llegado a un acuerdo
de no llorar
porque los hombres de nuestra familia
nunca lloran

así
por la mañana
medio dormido
con un realismo socialista
en un día nuevo
mi vida se pondrá
en una fila
hacia el infinito

***

Los trenes
a veces
cuando
ya no es necesario
estos trenes
llegan
justo a tiempo

***

La China
este País
junto con el sol
da un equilibrio
a nuestra tierra

***

Abandonado
convivimos solos
con mil millones
de personas iguales
que nosotros
moviéndonos a tientas

como el planeta Tierra
en este universo infinito
que aún se gira
abandonado por Dios
para siempre

***

En el pueblo
de los árboles cortados
sin quejas
de este bosque
como
gotas del sudor
de la frente de mi padre
y se enfría
en mis manos

***

Caza
aquí cazan
a las aves
que vuelan alto

para otros
han tendido trampas
en los matorrales

***

En la estación
para poder encontrarme
viajo
sin maletas
en un tren casual

nadie
me espera allí

***

Mis sueños
que tamicen mis sueños
y que solo se queden los amaneceres
oscuros y frágiles
del cielo de otoño

***

Una vela
incluso la llama roja del bosque
carece de sentido cuando
a veces
quieres encender una vela

***

Esta casa

esta casa tan vacía
se parece a ti y a mí

la araña sola se ha enrollado
en su propia telaraña
si por las noches estuvieras conmigo
te cubriría de corriente

***

Es una isla…

es una isla
y solo estás tú
y el agua también eres tú

***

Los demás

la felicidad de los demás
tiene otra unidad de medida

***

Los caminos

Los caminos que habíamos elegido
no son para volver

***

El tiempo

no consigo llegar a vivir aquí
el tiempo es demasiado largo

***

El pájaro

el pájaro rompe sus alas
con sus plumas estiradas
hacia el viento
el viento
deprimido
intenta repetir el vuelo del pájaro

***

El cielo sin pájaros

el cielo sin pájaros
y tienes miedo de vivir
te da más miedo que la muerte
mirar el celeste del horizonte
donde solo se ven
las sombras de las hierbas

entonces en tu pelo llevabas
un lazo dorado
(no era dorado
tenía puntitos azules
y verdes insensatos
simplemente estaba escribiendo poesías
y el color dorado era más apropiado)

los pájaros con chillidos volaban
hacia los países calurosos
el viento temblaba por sus chillidos
quitando tu lazo

ahora ya hace muchos años
que los pájaros no se van
pasan el invierno
junto con los pájaros domésticos
el cielo está vacío.

Fuente: Poesía internacional: Slavi Avik Harutyunyan (Armenia) – Revista Kametsa