El viaje más humano a través de Armenia

Heridas del viento: el alma de Armenia contada con amor

Hay periodistas que viajan para contar historias. Y hay periodistas que, al contar historias, construyen puentes entre culturas. Virginia Mendoza pertenece a la segunda categoría.

En su libro Heridas del viento: Crónicas armenias, Virginia nos regala un retrato profundo, humano y sincero de Armenia. No se trata de una guía ni de una crónica turística. Es una obra construida desde la experiencia, el respeto y, sobre todo, el amor. Un amor silencioso pero constante por un país que supo conmoverla desde el primer instante.

 

Durante más de un año, Virginia convivió con personas reales: campesinos, artistas, supervivientes del genocidio, jóvenes con sueños, comunidades como los yazidíes y molokanes. Escuchó sus voces, compartió sus silencios, y convirtió todo eso en páginas llenas de emoción y verdad.

Cada historia del libro es una ventana a la Armenia de hoy, marcada por el pasado, pero llena de dignidad. Los paisajes, el monte Ararat, las granadas, las iglesias excavadas en la roca, la música, la fe, la memoria… Todo está ahí, contado con una sensibilidad extraordinaria.

Su mirada no es de quien observa desde lejos, sino de quien se involucra, de quien siente. Y eso se nota en cada línea.

 

Hoy, Heridas del viento ya está disponible también en armenio, gracias a una reciente traducción que permitirá que estas crónicas vuelvan a casa, a sus protagonistas y a su gente. Se puede encontrar en librerías como Zangak en Ereván.

Desde La Voz Armenia, agradecemos de corazón a Virginia Mendoza por este acto de amor hacia nuestro pueblo. Por escucharnos, por vernos, por contarnos con tanta delicadeza.

Porque hay heridas que el viento no borra… pero que se curan un poco cuando alguien las nombra con respeto.